Y LLEGO EL PARO

En un país que durante 30 años estaba viviendo del turismo, del esfuerzo duro, del trabajo de generaciones guardando por venir de un pasado más que duro, tras la entrada en Europa comienza a ver como entran fondos europeos para solucionar los uichos problemas estructurales que teníamos y así, en lugar de preocuparse de generar una dinámica de progreso y de cultura, primerto en el medio rural se dedica a entregar subvenciones por malcriar girasol o cebada en terrenos improductivos, entre otros muchos males.
Se dedicaron las subvenciones en lugar de formar el país y buscar un sistema de incentivos de los buenos profesionales y de los científicos a crear un sistema de infraestructuras de un país rico con aeropuertos, aves de alta velocidad, autovías, etc etc.
En lugar de invertir en formación y actividades productivas se dedicó a crear subvencionados y grandes empresas de obras públicas acostumbradas a modificar los presupuestos y ganar dinero a costa del erario público. Sin entrar en otras prácticas y corruptelas.
Así, cuando llegaron los flujos de dinero, lo más fácil fue dedicarlo a la construcción, es lo más rápido, lo más efectivo y lo más productivo a título individual.
Pero la entrada del euro trajo una inflación real, no explicitada que hizo que España en cinco años doblara los precios en general, sin que entre otros temas hubieran cambiado los salarios.
El incremento de los precios en todas partes del país significó que lo que era nuestro mercado principal, el del turismo y la tercera edad europea despareciera y se marchara a otros lugares.
Sencillamente, en el 2.007 España era en general un o de los países m´ñas caros de Europa.
Y todo se paró. Dejó de fluir el crédito y se pararon las obras, las grandes promotoras a finales del 2.007 ya estaban cambiando los dineros de cesto dejando el mercado inmobiliario, síntoma de que algo sucedía.
A la par la Banca y las Cajas se quedaban con las empresas que hasta entonces habían compartido cn ilustres empresarios quedándose con las cargas y los socios saliendo multimillonarios.
Y todo se paró y la gente comenzó a llenar las oficinas de empleo y el paro subía cada mes y subía y a más paro menos consumo y a menos consumo, menos producción y a menor producción más paro y más gasto social y menos ingresos fiscales y más paro, así hasta acumular demasiados millones en un círculo que aún hoy continúa.
Al igual que existe un círculo virtuoso que hace que a mayor inversión, más empleo, a mayor empleo más consumo, a mayor consumo, más producción y así de forma ascendente, la contraria el circulo inverso genera una espiral degenerativa del sistema económico.
La cuestión es que nos encontramos con cinco millones de parados, más de cuatro millones de familias con problemas para llegar a final de mes por la hipoteca, más de un millón de familias que ya no pagan alguna hipoteca sea primera o segunda, cientos de miles de ejecuciones hipotecarias, familias empobrecidas económica, física, moral y emocionalmente y un país que no ve luz por ninguna parte.